Dos clientes firman una hipoteca con su banco por valor de 190.743 euros y condiciones leoninas. El contrato estipulaba unos intereses de demora del 19% nominal anual en caso de retraso en el pago. Además, el banco podia pedir la devolución anticipada de todo el préstamo si no se reembolsa cualquiera de los vencimientos.

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